Hacia una música inclusiva: El canto coral como ejemplo de diversidad sonora


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Hacia una música inclusiva: El canto coral como ejemplo de diversidad sonora



En el panorama musical actual, la rígida división entre la música académica y la popular se presenta como una barrera artificial que limita la comprensión y el disfrute de la vasta riqueza musical que nos rodea. En este artículo, nos proponemos reflexionar sobre la necesidad de superar estas categorías tradicionales y adoptar una visión más inclusiva y dinámica de la música, tomando como punto de partida el canto coral como un espacio donde convergen diversas expresiones musicales.


La categorización de la música en académica y popular responde a una construcción histórica que ha privilegiado ciertos estilos y formas musicales sobre otros, relegando a un segundo plano expresiones que no se ajustan a los cánones establecidos por las instituciones académicas y las élites culturales. Esta dicotomía ha generado sesgos y exclusiones que han invisibilizado y silenciado las voces de comunidades marginadas, como las mujeres, las minorías étnicas y los pueblos originarios.


El canto coral, por su naturaleza inclusiva y versátil, se convierte en un espacio donde se difuminan las fronteras entre lo académico y lo popular. 


En la práctica coral, se interpretan obras de diversos géneros y estilos, desde el repertorio clásico hasta la música folclórica y popular, pasando por composiciones contemporáneas y arreglos creativos. Esta amplitud de repertorio permite a los coristas explorar diferentes universos sonoros y enriquecer su experiencia musical.


La resignificación de obras musicales a través del canto coral es un proceso enriquecedor que permite redescubrir y reinterpretar piezas de diferentes tradiciones. Al adaptar una obra a la textura vocal y las características del coro, se abre la posibilidad de explorar nuevas sonoridades y matices, aportando una nueva perspectiva a la obra original.


En este proceso de resignificación, es fundamental reconocer y respetar la autoría de las obras musicales, evitando la invisibilización de los creadores. Es importante destacar que la música popular no es anónima por naturaleza, sino que está profundamente arraigada en las tradiciones y culturas de los pueblos.

Superar las categorías tradicionales de la música no significa negar la existencia de diferentes estilos y expresiones musicales. Por el contrario, se trata de reconocer la riqueza y diversidad del panorama musical, valorando cada una de sus manifestaciones en su propio contexto y significado.


En definitiva, el canto coral se erige como un ejemplo paradigmático de la confluencia de diversas expresiones musicales,desafiando las categorías tradicionales y abriendo un camino hacia una comprensión más inclusiva y dinámica de la música. Es hora de dejar atrás los prejuicios y abrazar la diversidad musical en toda su riqueza, reconociendo el valor de cada estilo y expresión sonora.


En el podcast dirección coral Online hace poco charlamos con la Mgter Monica Pacheco de la ciudad de Mendoza, Argentina sobre este tema


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